22 de Julio, 2024 - Todas las promesas
2 Corintios 1:20 ”Porque todas las promesas de Dios en él son sí, y en él amén, para gloria de Dios por nosotros.”
Para aquellos que están en Cristo Jesús, las promesas de Dios son sí y amén. Y sólo aquellos que han nacido de nuevo califican para todas las promesas "en Él"; aquellas cosas que Jesús ha obtenido para nosotros a través de Su muerte y resurrección. La mayoría de los creyentes no caminan en ellas porque no las conocen. Tú debes conocer la promesa antes de que puedas caminar en la promesa. Debes saber que has heredado algo antes de que puedas reclamar tu herencia. Cuando caminamos en las promesas por fe, cuando recibimos esas promesas como nuestras, entonces trae gloria a Dios.
¿Por qué la Palabra nos diría que traen gloria a Dios si no lo hacen? Tantas personas no reciben lo que Dios ha puesto a su disposición porque se les ha enseñado religión en lugar de la Palabra de Dios. Si miras los versos arriba de este, Pablo, quien tenía que corregir a la iglesia de Corinto, les está diciendo que Dios no es a veces sí y a veces no. En otras palabras, él no es ambiguo. El es muy claro, y el es muy exacto. Algunos dirán: "Nunca se puede saber lo que Dios va a hacer". Es cierto que los caminos y los pensamientos de Dios son más elevados que los nuestros, pero Él no dijo que no se pudieran conocer.
De hecho, Él dijo que el Espíritu Santo te revelaría los pensamientos y caminos de Dios. Esta escritura te está diciendo que las promesas que están escritas para ti son exactas, y son sí y así sea, o amén, para ti. Si encuentras un "en El," "por Quien," o un "en Cristo," puedes contarlo hecho porque Él lo quiso decir; y si puedes creer la promesa, puedes caminar en ella. Aquí hay algunas para que empieces a meditar, "Yo soy la justicia de Dios en Cristo Jesús", "Yo estoy completo en Él", "Cualquiera que está en Cristo es una nueva creación", y "en Quien tenemos redención". Éstas son sólo algunas de tantas. Encuéntralas y medita en ellas, y cambiarán tu caminar con Dios. ¿Cuáles son algunas de tus favoritas?
Pr. Mark Garver